Tal vez os habéis preguntado porqué juguetes Montessori, qué los diferencia del resto, o a qué nos referimos con este nombre. En realidad, más que "juguetes" habría que referirse a ellos como "materiales" que ayudan a la formación del niñ@ como persona, que lo preparan para la actividad humana.
Observando a vuestros hijos e hijas, habréis seguramente notado cuánto les interesan nuestras cosas. Podemos darles un montón de juguetes y fácilmente descubrir que los ignoran porque prefieren jugar por ejemplo con los cajones de un armario, con una cuchara, etc...
Uno de los problemas de nuestra sociedad es que muchas veces se quita a los niños la oportunidad de relacionarse con objetos de nuestra vida cotidiana. Otro es que se hace abuso del "no", prohibiendo muchas cosas que si bien para los pequeños resultarían útiles para su desarrollo, obligan a los adultos a estar más pendientes de ellos. Entre estas prohibiciones podemos contar por ejemplo la falta de acceso a cosas pequeñas por miedo a que los bebés se atraganten. La manipulación de objetos pequeños potencia el desarrollo del aparato motor fino, además de la concentración.
Maria Montessori observó que entre los 0 y los 6 años, los pequeños están centrados en sí mismos, están centrados en su propio desarrollo y pasan por periodos bien definidos de interés en ciertas áreas de su desarrollo. Estas etapas las llamó "periodos sensitivos". Durante estos periodos la repetición es fundamental para que los pequeños consigan dominar una abilidad determinada. En esta franja de edad, la mente de los pequeños es como una esponja que obsorbe todo lo que haya a su alrededor. De ahí la importancia del ambiente.
Los materiales de los que vamos a hablar son maneras de potenciar las áreas de interés que observamos en nuestr@s niñ@s, y por consiguiente favorecer a su desarrollo. A pesar de que gran parte de los materiales Montessori tiene traducción en juguetes que encontramos en tiendas de juguetes, la mayoría de los materiales a los que me voy a referir son caseros. La ventaja de los materiales hechos por nosotros, a parte del ahorro económico, es que para hacerlos hemos tenido que estar atentos a las necesidades específicas de nuestr@s niñ@s y hemos tenido que poner nuestra creatividad en práctica para crear una actividad particular que satisfazga esas necesidades. Este proceso, por otra parte, potencia el apego.
Para acotar el tema, de momento hablaremos de materiales que podemos ofrecer a bebés desde las dos semanas y hasta alrededor de los 18 meses. La edad debe servir como mera orientación ya que la idea de base es ofrecer una actividad que resulte adecuada para un determinado bebé en un momento determinado.
En la edad en que el bebé todavía no mueve las manos, se le pueden ofrecer móbiles que potencian la concentración. La colocación del móbil debería ser tan cercana al bebé como sea posible.
A las dos semanas un móbil interesante es el llamado Munari, de figuras en blanco y negro.
Más adelante otros móbiles son el Octaedron y el Gobbi. El primero consta de tres octaedros hechos en los tres colores primarios. El segundo consta de cinco bolas colocadas de forma ascendente con matices de color que van de más oscuro (más abajo) a más claro (más arriba).
Móbil Gobbi. Photo credit: At Home with Montessori |
Photo credit: Kylie D'Alton at How we Montessori |
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Hacia los seis meses, cuando el agarre está consolidado, ofrecer al bebé cereales de pequeño tamaño permitirán que desarrolle concentración y psicomotricidad fina a la vez que autonomía para alimentarse a sí mismo.
De ahí en adelante algunas ideas de actividades pueden ser: botellas de colores, una caja de permanencia, huevo de madera y base para meterlo, dos aros de madera y una base en la que colocarlos, muñecas rusas, el juguete llamado Skish, una caja con tapadera con mango (preferiblemente de madera), puzzle de figuras geométricas (preferiblemente empezar con una sola figura, el círculo), bloques de tela, cesto de instrumentos, cesto con diferentes pelotas, cesto de ropa, gorros, etc.
Un espejo resulta también una herramienta importante que potencia el auto conocimiento y la auto estima.
A partir del año de edad, actividades con animales de granja, con colores básicos, juegos en la arena y actividades con agua, para potenciar la psicomotricidad fina actividades con pegatinas, organizar por colores, por formas, por material, correspondencias objeto real-objeto fotografiado...
Las actividades de la vida práctica adoptan una importancia especial hacia los 15 meses, edad en que la mayoría de bebés ya camina. Entonces se pueden proponer actividades que vayan encaminadas a la autonomía en el vestirse, ayudar a cocinar, limpiar, etc.
Los materiales sensoriales que Maria Montessori creó para niños enfermos, son muy interesantes para todo tipo de niños. Los juegos con texturas, fáciles de hacer, les encantan.
ResponderEliminarPaqui Patricio